Si te gusta ir a todas partes con tu perro, incluso andar en bicicleta, anota estos tips para tener una mejor experiencia saludable y divertida para ambos.
Hacer bicicleta o bikejoring u otro deporte con tu mascota es una actividad que además de ser saludable, es una actividad para fortalecer la relación. Cuenta con múltiples beneficios, como lo son mantenerse en línea, reducir el estrés y reforzar la salud mental.
Pero como todas las actividades físicas con perros, existen varios riesgos que debes tomar en cuenta al momento de usar la bicicleta con tu mascota. La idea es que ambos, mascota y propietario, lo pasen bien, tomando aire fresco, divirtiéndose y entrenando, por eso querrás prevenir cualquier eventualidad que pueda suceder en el trayecto.
Cómo montar en bicicleta y llevar a tu perro
Es recomendable que comiences a montar en bicicleta con tu perro cuando ya tenga edad suficiente y responda obedientemente a tus órdenes. Debe entender claramente cuando le dices: “alto”, “izquierda”, “derecha” y “vamos”.
Es fundamental que el animal se acerque a tu lado cuando le llamas. Esta situación la debes controlar con total seguridad cada vez que quieras salir al exterior con tu mascota.
Por otro lado, montar en bicicleta y llevar a tu perro al lado requiere de un equipo básico de seguridad. Necesitarás un casco, protecciones para tus articulaciones y una extensión adecuada para sujetar a tu mascota.
Existen en el mercado diferentes tipos de correas, pero una correa en particular es la más adecuada para salir de paseo en bicicleta con tu perro. Se trata de una extensión fija, de unos 60/70 centímetros de extensión que va fijada debajo del asiento. En su otro extremo se ata una correa corta al collar del perro. Además, también existen carritos para perros donde puedes meterlo y colocar en la parte trasera de tu bicicleta, para así protegerlo de cualquier peligro que exista en el camino.
El objetivo de este dispositivo es mantener al perro lejos de los efectos de las ruedas de la bicicleta y poder mantener un ritmo constante, con la seguridad de tener las dos manos libres para poder conducir la bicicleta sin riesgos, y sin poner en peligro a tu mascota.
Además de protegerlos a ambos de accidentes, también debes evitar pasear a tu perro con la bicicleta en días calurosos y soleados, y en superficies que se calienten demasiado, ya que ellos usan tanto la lengua (jadeando) como sus almohadillas para transpirar y equilibrar sus temperaturas al sudar. Si el piso está demasiado caliente, el perro no podrá disminuir su calor corporal y puede sofocarse y sufrir un golpe de calor, lo cual puede ser fatal y convertir el paseo en una desgracia.
Para un perro pequeño, usa una cesta de viaje
No solo los perros de gran porte están capacitados para recorrer grandes distancias corriendo, muchas razas de perros pequeños también disfrutan trotando en los paseos, cuando sales en bicicleta.
El único inconveniente es que, seguramente, se cansarán mucho más rápido y no podrán recorrer tan largas distancias como lo hacen otros perros más grandes.
Para solucionar este problema, existe en el mercado una solución muy práctica y económica: la cesta de viaje. Estos tipos de cestas son las indicadas para mascotas de hasta 6 o 7 kilos y se fijan al manillar de tu bicicleta. Son muy prácticas, ya que cuentan con un sistema de agarre rápido que permite desmontarla rápidamente.
Por lo general estas canastas incluyen un cojín y una correa corta que se engancha en su collar, lo cual evita que salte hacia el suelo y se lesione. Existen algunas cestas que tienen una especie de cúpula de alambre con bisagras y cierre exterior que garantiza la seguridad del perro, y en las que no es necesario amarrarlo.
Es conveniente que, en lugar de collar, el perro porte un arnés, ya que, en caso de accidente o situación extrema, no corra el riesgo de estrangularse.
Existen otras versiones de cestas, con dos ruedas, adaptadas para ser enganchadas al cuadro de la bicicleta y ser remolcados. Estos dispositivos están indicados tanto para perros pequeños como para perros mayores y ancianos.
Utilizando este tipo de carros es posible sacar a paseo a perros con poca movilidad debido a su edad, y a aquellos convalecientes de alguna dolencia.
Ventajas y desventajas de hacer ciclismo con un perro
Salir de paseo y hacer ejercicio con tu perro le hace ser más sociable y lo mantiene en un buen estado físico. Pero, además, tiene muy diversas ventajas para ambos, pues mejorará su salud, especialmente el sistema circulatorio, respiratorio e inmune, les ayudará a reducir su estrés y a dormir mejor.
Lamentablemente, en ocasiones puedes tener algunas dificultades, por lo cual se podría decir que existen algunas desventajas:
- Las primeras salidas pueden ser confusas para tu perro.
- Si la correa es muy larga, el perro puede atravesarse delante de la bicicleta y hacer que te caigas.
- Si no ha hecho sus necesidades antes del paseo, probablemente se detenga bruscamente en cualquier momento y te haga perder el equilibrio.
- Si te excedes en el tiempo o en las distancias recorridas, tu perro puede deshidratarse y en casos extremos sufrir un golpe de calor, en particular en días calurosos.
- El uso de canasto en el manillar puede ser peligroso para el perro en caso de sufrir una caída en la bicicleta.
¿Sabes qué es el bikejoring?
El Bikejoring es un deporte similar al mushing, el tradicional deporte de trineo tirado por perros, pero con bicicletas.
Generalmente suele usarse un solo perro, pero si las condiciones y el terreno lo permiten, se pueden usar dos.
El deporte suele realizarse en senderos boscosos y entre montañas, por lo cual, para practicar este deporte con tu mascota, deberás tener una bicicleta especialmente adaptada a esos terrenos.
Existen dos formas de participar en bikejoring: la carrera directa, la cual es ganador quien llega primero, y la carrera cronometrada, la cual te aporta un poco más de tranquilidad, pues corres tú solo con tu mascota, lo cual previene muchos riesgos.